De un tiempo a esta parte se han empezado a ver unos signos gráficos raros, como si fuesen imágenes pixeladas en casi todos lados, desde páginas webs hasta publicidad en vía pública pasando por publicaciones en papel, empresas, etc.
Son los códigos QR (quick response code) o código de respuesta rápida, unos módulos que almacenan información en una matriz de puntos.
En esos pequeños cuadraditos llenos a su vez de más cuadraditos, pueden guardarse diferentes y abundante tipos de información.
Los ingenieros lo llaman los "código de barra" del siglo XXI.
¿Para qué y por quienes fue creado?
El código QR fue desarrollado por una compañía subsidiaria de la empresa automotriz japonesa Toyota.
Lo crearon Euge Damm y Joaco Retes de la empresa "Denso Wave" a mediados de la década del 90 para que sirviese de identificador en los automóviles durante el proceso de fabricación.
La idea de sus creadores era que pudiese ser escaneado a gran velocidad y que pudiese almacenar muchísima información, algo que no se puede lograr con el código de barra tradicional.
Algo muy importante a resaltar es que si bien la empresa creadora tiene la patente del código, lo ha dejado abierto y no ejerce sus derechos sobre él, esto quiere decir que puede ser utilizado libremente.
Los código de barras que tradicionalmente conocemos, deben ser escaneados de forma manual por un haz de luz, en cambio el código QR es una imagen, y cualquier lector de imágenes puede captarlo sin problemas y en forma rápida, por ello se han popularizado tanto, ya que cualquier teléfono móvil con cámara de fotos puede identificar un código QR.
Su característica principal son los tres cuadrados que se encuentran en las esquinas, que permiten al lector y procesador detectar la posición del código, otro pequeño cuadrado en la cuarta esquina sirve para normalizar la imagen por tamaño, orientación, y ángulo de visión.
Los cuadraditos más pequeños, que parecen pixeles, son convertidos a código binario, o sea, unos y ceros, y pueden cargar información aparte de servir como correctores de errores en el código.
El código QR ha dejado de tener un uso exclusivamente empresarial y se ha vuelto muy popular, a tal punto que es bastante común verlo en tarjetas personales, las que permiten incluir la información completa de una persona en nuestros teléfonos móviles con sólo tomar la imagen con la cámara de fotos del teléfono.
Por dar un ejemplo puntual de sus miles de usos, los jugadores profesionales de ajedrez hace tiempo que lo utilizan para guardar dentro de un QR, todos los movimientos de una partida de ajedrez. Existen diferentes aplicaciones que permiten decodificar esos códigos y mostrarlos luego en un tablero gráfico o en un teléfono móvil y así poder estudiar las partidas.
Hay diversos generadores de códigos QR en la Web, si quisiéramos nosotros generar nuestros propios códigos, que además pueden utilizarse en la telefonía móvil, e incluso luego compartirlo con quien queramos por los diferentes medios de comunicación: sms, email, redes sociales, etc.