La elección de pareja constituye, tal vez, una de las decisiones más importantes, que la mayoría de las personas tendrá que realizar.
¿En qué punto, hombres y mujeres deciden dejar de adquirir información adicional sobre su pareja, para tomar una decisión?
Hace un tiempo, se realizó un estudio al respecto, veamos los resultados.
Elegir una pareja, es una decisión que tiene sus raíces en principios evolutivos fundamentales, sobre todo, cuando se investigan las diferencias del grado en el cual, hombres y mujeres se involucran en la búsqueda de un compañero/a, antes de rechazar pretendientes potenciales o elegir a una pareja.
Esto es de gran relevancia, ya que pocos o ninguno de nosotros analiza toda la información disponible, antes de elegir una alternativa.
El departamento de psicología de la Universidad de Stanford, realizó un sondeo sobre la cantidad de información que hombres y mujeres adquieren antes de una elección o rechazo de un compañero sentimental.
La investigación
Para el estudio, se eligieron al azar a 140 estudiantes (la única condición para participar en esta prueba, era que debían ser heterosexuales), 70 hombres y 70 mujeres.
Dicha exploración consistía, en que cada participante debería elegir, mediante imágenes e información en un ordenador a su pareja ideal, mujeres para el caso de hombres y hombres para las mujeres.
El mecanismo consistía en que habría un máximo de 30 pretendientes (aunque esta información era desconocida para los participantes), se mostraría el rostro de cada uno, pero además, cada pretendiente tendría sus propios atributos (estatura, peso, ocupación, ingresos económicos, posición social, sentido del humor, etc.) un total de 25 atributos.
Cada estudiante se sentaba frente al ordenador y al comenzar la prueba, se le mostraría la foto del primer pretendiente, la persona encuestada debería pedirle al ordenador un atributo tras otro, hasta aceptar o rechazar a ese pretendiente.
Si se rechazaba a un pretendiente, el sistema pasaba al siguiente, no se podía volver para atrás y así sucesivamente.
Cuando la persona elegía a un (o una) pretendiente, terminaba la prueba.
Resultados de la investigación
Básicamente los resultados que se buscaban eran 2, la cantidad de pretendientes que observaron cada uno de los participantes antes de elegir a su pareja ideal y la cantidad de atributos vistos en cada caso.
Resultado 1:
En promedio, las mujeres evaluaron casi el doble de pretendientes que los hombres, antes de elegir a su compañero. Más concretamente 11,9 evaluaciones en el caso de las damas y 6,2 en el caso de los varones.
En otras palabras, las mujeres a la hora de elegir compañero, necesitaron observar a un mayor número de pretendientes antes de comprometerse con uno.
Resultado2:
Las mujeres necesitaron una cantidad de atributos menor antes de rechazar a cada pretendiente. Las damas miraron un promedio de 4,6 atributos por pretendiente, mientras que los hombres observaron un promedio de 7,1 atributos por pretendiente.
Esto quiere decir, que las mujeres rechazaron más rápidamente que los hombres, o sea, ellas necesitan menos información para aceptar o rechazar a un pretendiente.
Conclusiones
Estas diferencias entre los dos sexos a la hora de elegir pareja, son una manifestación de la teoría de ‘inversión parental’ que establece que en cualquier especie, el sexo que lleva la mayor inversión parental obligatoria mínima (obviamente, las mujeres en el caso humano) será mucho más prudente a la hora de elegir una pareja dado que, las obligaciones y los costos son mayores.
Por tanto, es lógico que el sexo femenino sea más selectivo buscando entre el mayor número de pretendientes posible y que, además, rechacen potenciales compañeros con mayor rapidez.