Correr el riesgo ¿si o no?


Cuando tomamos decisiones peligrosas o arriesgadas, hay que hacer frente a la posibilidad que no nos vaya bien. Por esa razón, el cerebro ha desarrollado mecanismos para evaluar los riesgos y evitarlos llegado el caso.
Sin embargo, hay gente que asume enormes riesgos o se enfrenta a grandes peligros, muchas veces inutilmente o hasta por diversión.



Numerosas investigaciones han comprobado que la gente evita riesgos a menudo, incluso bajo situaciones en las que potencialmente podrían derivarse importantes beneficios. A ese comportamiento se le denomina "aversión al riesgo", pero no todos poseemos el mismo grado de noción de peligro.

Un estudio recientemente publicado informa de la relación que existe entre los diferentes grados de "aversión al riesgo" y el funcionamiento de un área del cerebro denominada amígdala.

La investigación se basa en el estudio de dos personas que tenían la amígdala dañada en una zona en particular y que mostraron una sorprendente falta de aversión al riesgo al realizar apuestas de dinero, a diferencia de otras personas que no sufrían ningún daño.

Según los científicos autores del trabajo, los resultados sugieren que la amígdala juega un papel clave en la generación de la "aversión al riesgo" mediante la inhibición de actuaciones que pueden tener resultados peligrosos. Al parecer, la valoración de la recompensa radica en un circuito neuronal diferente, aunque los dos (el de la valoración de la ganancia y el de la valoración del riesgo) se hallan interconectados, y la decisión que se toma depende de la interacción entre ambos.

Los resultados obtenidos en la investigación sugieren que las diferencias que existen entre unos individuos y otros en relación con este aspecto del comportamiento podrían tener su base anatómica en esta zona del cerebro.

La relación entre la aversión al riesgo y la amígdala parece ser compatible con lo que ya se sabía acerca de este órgano, ya que era conocida su relación con los comportamientos de precaución, vigilancia y temor ante situaciones de incertidumbre.



¿Que es la suerte?... y como atraerla


Dice el dicho que algunas personas nacen con estrella y otras nacen estrelladas. Sin embargo, ¿Eso es verdad? ¿Será que la suerte sólo se encuentra al lado de algunas personas y alejada de otras? o en cambio ¿la suerte se puede atraer y está al alcance de cualquier persona?



Basicamente, se podría decir que existen dos tipos de personas: las que creen en la suerte (que casi siempre están amargadas) y las que se crean sus propias oportunidades. Estas últimas suelen estar más abiertas a todas las opciones, valoran todos los caminos que pueden seguir y, si las cosas no salen como esperaban, se levantan, se sacuden la decepción y siguen adelante buscando una nueva oportunidad. Obviamente, esta forma de comprender la suerte les permite vivir más felices y alcanzar sus objetivos.

Una investigación de un grupo de psicólogos en la Universidad de Saint Mary en Maryland (USA), encontró que las personas "con suerte" comparten algunas características esenciales: aprovechan más las oportunidades, son competentes, tienen confianza en sí mismos y tienden a asumir más riesgos.
Otro detalle importante es que estas personas suelen tener un fuerte sistema de apoyo a su alrededor, aunque esto último no se da en todos los casos.

La misma investigación reveló que las personas "con suerte" muestran elevadas puntuaciones en el factor extroversión de su escala de personalidad. Esto quiere decir que estas personas son más propensas a conocer más gente nueva y a tener grandes grupos de amigos y conocidos. De la misma forma, estas personas puntúan más bajo en la escala de neuroticismo, lo que indica que tienden a experimentar menos estados negativos como la ansiedad, la ira, la culpa y la depresión.


Estos conceptos nos indican que quizás deberíamos cambiar la idea que tenemos de lo que es la suerte. Dejar de pensar que se encuentra fuera de nosotros y comenzar a imaginar que la suerte también es una actitud ante la vida.


¿Como atraer la suerte?

Después de realizado dicho estudio y visto los resultados los investigadores dan algunos consejos para atraer la suerte:

  • Romper la rutina: conocer personas nuevas, emprender caminos diferentes para llegar al mismo lugar y ábrete a las oportunidades, incluso si son del todo desconocidas.

  • Convertir lo negativo en positivo: si sucede algo malo, piensa que pudo haber sido peor y trata de sacar lo más positivo de este hecho, aunque sea tan solo una enseñanza para el futuro.

  • Confía en tu instinto: en muchas ocasiones es el instinto quien nos conduce a tomar las mejores decisiones por lo tanto, deberíamos aprender a escucharlo más.

  • Plantéate metas elevadas pero realizables: ponte objetivos elevados que demanden persistencia y esfuerzo pero que puedan ser alcanzados. Poner el listón alto en ocasiones es todo lo que necesitas para tener suerte.